El artículo publicado en la revista The Lancet advierte de la amenaza de la contaminación por plásticos, la cual pone en peligro la salud humana y los ecosistemas, y enfatiza en dos aspectos que son muy relevantes a la hora de buscar soluciones a este gran problema de contaminación ambiental, y que deben ser considerados en la próxima reunión para el Tratado Mundial sobre los Plásticos. 

Por un lado, expone la necesidad de abordar la problemática en todas las fases del ciclo de vida de los plásticos, desde su producción, pasando por su uso y hasta su eliminación. Si tenemos en cuenta la tesis apoyada por el bloque de países productores de petróleo y de plástico en las reuniones celebradas hasta el momento sobre el Tratado Mundial, la etapa de recuperación y reciclaje de los residuos plásticos sería de vital importancia. Por lo tanto, estas etapas también deben ser consideradas en la evaluación de los riesgos, de cara a promover una Economía Circular ‘limpia’. 

Precisamente unido a este concepto de Economía Circular 'limpia' se encuentra el segundo aspecto de gran relevancia. Se trata del control de los aditivos químicos tóxicos asociados al plástico en todas las fases del ciclo de vida, incluida la etapa de reciclaje. Es importante controlar la presencia de estos tóxicos sobre todo en aquellos casos en que el plástico reciclado tiene una aplicación posterior diferente a la original (por ejemplo, neumáticos reciclados para parques infantiles). Existe un problema de falta de transparencia en torno a qué sustancias químicas están presentes en los plásticos y en sus residuos. La introducción de un 'pasaporte digital' que incluya esta información en todos los materiales producidos lograría avanzar hacia una gestión mucho más sostenible. 

Otro aspecto también importante tratado en este artículo es el que hace referencia a los productos sanitarios. Está claro que el uso de material plástico en este sector es de vital importancia y no podemos prescindir de él, pero hemos de tratar que dichos materiales sean seguros y eficaces y, por tanto, no deberían quedar exentos del Tratado Mundial sobre los Plásticos.

ES