Víctor Borrell
Profesor de Investigación del CSIC en el Instituto de Neurociencias (Alicante), donde dirige un grupo de investigación que estudia el desarrollo embrionario del cerebro y su evolución, especialista en el plegamiento de la corteza cerebral
El Dr. Svante Pääbo es pionero en el estudio del genoma ancestral del hombre, particularmente, del neandertal, y el Dr. Wieland Huttner es pionero en el estudio del desarrollo embrionario del cerebro y los aspectos únicos del ser humano. Ambos científicos son celebridades a nivel mundial en su campo de trabajo. En este estudio trabajaron conjuntamente para identificar cuáles son las diferencias en el desarrollo cerebral entre el hombre moderno y el del neandertal, con el fin de comprender qué características pudieron dar al hombre moderno ventaja y éxito evolutivo.
Entre nuestro genoma y el del neandertal hay muy pocas diferencias, afectando a solo tres de las proteínas importantes para el desarrollo embrionario del cerebro. Los investigadores estudiaron el efecto que estas mínimas diferencias tienen sobre las células madre neurales humanas, sustituyendo la versión moderna por la neandertal. Por comparación, también crearon ratones transgénicos con la versión del hombre moderno sustituyendo a la del ratón. Estos experimentos demostraron que las proteínas en versión neandertal funcionan peor que las del hombre moderno, causando más errores cromosómicos durante la división celular, lo que también ocurre con la versión del chimpancé y del ratón.
Esta fiabilidad superior en el hombre moderno pudo ser una ventaja evolutiva para tener un desarrollo cerebral más óptimo, sufriendo menos errores durante la división celular. Estos hallazgos confirman por primera vez las hipótesis que proponían un desarrollo cerebral superior en el hombre moderno comparado con el neandertal, pero que las diferencias no son en cantidad de neuronas nacidas, sino en el control de calidad de este proceso, lo que tiene mucho más calado en la función del cerebro adulto. Este es un primer paso para comprender hasta qué punto estas diferencias pudieron darnos alguna ventaja, sea intelectual o de otro tipo, mostrando también que a nivel genómico pequeños cambios pueden tener grandes consecuencias.