Antonio Becerra Fernández
Especialista en Endocrinología y en Identidad de género y profesor honorífico de la Universidad de Alcalá
Un sesgo importante es que incluyen como mínimo tres meses de tratamiento con bloqueadores. Ese tiempo de tratamiento no es desde el estadio II-III de Tanner (alrededor de los 12-13 años) y hasta los 16 años, donde se añadían estrógenos o testosterona. Los bloqueadores se tienen que utilizar desde la fase II de Tanner, cuando los menores tienen entre 11 y 12 años. A esa edad con tres meses no se bloquea la pubertad, ya está muy avanzada.
Otro sesgo es que en la cohorte las proporciones en el sexo asignado al nacer son opuestas a lo habitual. Siempre había más chicas trans que chicos trans, como dos tercios, y ahora ha cambiado: el 31 % son transición de chico a chica (asignados como masculino al nacer), y el otro 69 % son transición de chica a chico.