Pablo Fernández Navarro
Investigador científico de la Unidad de Epidemiología del Cáncer y Ambiental del Centro Nacional de Epidemiología, Instituto de Salud Carlos III, miembro de CIBERESP y cocoordinador del Subprograma de Vigilancia epidemiológica del Cáncer – VICA del CIBERESP
La monitorización de la situación del cáncer, que es una de las principales causas de morbimortalidad del mundo, es crucial para poder controlar el impacto que tiene esta enfermedad en la población. Para medir dicho impacto es necesario conocer su magnitud y para ello se calculan distintos tipos de indicadores (mortalidad, incidencia…). Estos indicadores aportan información muy relevante para la planificación de actividades preventivas y evaluadoras que puedan lograr una disminución de la mortalidad o la incidencia o mejorar la asistencia sanitaria.
La Agencia Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC) de la Organización Mundial de la Salud (OMS), a través de su Observatorio Mundial del Cáncer (Global Cancer Observatory (GCO)), ofrece estadísticas actualizadas sobre el cáncer por países y regiones mundiales, relacionadas con los indicadores mencionados, siguiendo una metodología adecuada para el objetivo que persigue.
Las últimas estimaciones sobre la carga mundial de esta enfermedad para 2022, que se presentan en un formato más claro que el de las que ya había para 2020, muestran a nivel general que los tumores de pulmón, mama, colorrectal y próstata siguen ocupando los principales puestos en cuanto a carga de esta enfermedad.
Para España, concretamente, se observa que ha habido un aumento en algunas tasas de incidencia como la de mama y una disminución en otras como en el caso de próstata respecto a 2020. Habrá que analizar en profundidad las variaciones regionales y temporales de estos indicadores, que seguro contribuirán a la vigilancia y el control del cáncer en la población.