José Luis Díaz-Maroto
Médico de familia y responsable de comunicación del grupo de trabajo de tabaquismo de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN)
Desde SEMERGEN hacemos una valoración muy buena. Ya llevamos tiempo esperando esta noticia, pero tenía que ser a nivel nacional, aunque si se empieza por una autonomía, bienvenida sea. Es muy importante que se lleve a efecto. En primer lugar, porque precisamente las terrazas de cafeterías y restaurantes que en verano están al descubierto, en invierno o en otoño, cuando hace frío, en muchas ocasiones no se cumple la legislación vigente de hace diez años que decía que solamente se podía fumar o poner las terrazas para fumadores que estuvieran abiertas. Ahora muchas veces se ha trasladado el bar, donde no se puede fumar, a las aceras, pero con terrazas totalmente cerradas, incluso con puertas y con plásticos.
Por tanto, está muy bien que se prohíba por fin, pero que se prohíba totalmente en las terrazas y que estén abiertas. Y ya por extensión en marquesinas, entradas de edificios o próximas a colegios e institutos. También tendría que cumplirse la legislación vigente en centros sanitarios, que está prohibido fumar en los recintos aunque sea fuera y al aire libre y que tampoco se cumple. Avanzaríamos mucho.
Por otro lado, se desnormaliza el hecho de estar haciendo una actividad lucrativa o reunido con los amigos en cafeterías o restaurantes que estén abiertos al exterior y que se asocie ese ocio al consumo de tabaco. Esto a la gente joven le viene muy bien: desnormalizar el consumo aunque sea en espacios abiertos. Y ya por extensión estaría muy bien que se cumpliese también en playas y otros recintos abiertos como conciertos. Tenemos que ir a más, aunque sean espacios abiertos totalmente.