Iñaki Galán Labaca
Investigador científico del Centro Nacional de Epidemiología-Instituto de Salud Carlos III
El mensaje de que bajas cantidades de consumo de alcohol pueden tener efectos beneficiosos en el estado de salud se ha construido sobre una evidencia científica poco sólida. Este artículo aborda los múltiples sesgos que tienen los estudios observacionales de cohortes en la asociación del consumo de alcohol y la mortalidad, destacando el uso como categoría de referencia a los no bebedores, en la que suele incluirse de forma habitual a bebedores ocasionales y exbebedores.
Incorpora, respecto a trabajos previos, una clasificación en función del control o no de múltiples sesgos, diferenciando según el ajuste de cada uno de ellos, y separando de forma general en estudios de baja y alta calidad. La conclusión, tras la revisión de 107 estudios longitudinales, es la enorme variación en los resultados en el que se apoya este mensaje, observando que al seleccionar cohortes jóvenes y separando a exbebedores y bebedores ocasionales de los abstemios, el riesgo de mortalidad en consumidores de bajas cantidades de alcohol era muy similar.
El enfoque metodológico del estudio es apropiado para los objetivos planteados. Entre sus fortalezas destaca que es una reciente revisión sistemática de los estudios de cohorte publicados. Entre sus limitaciones, quizás hubiera sido interesante diferenciar un grupo de análisis para los estudios de cohortes de base poblacional, que tienen menos sesgos de selección que las cohortes sustentadas en muestreos de conveniencia.