Ignasi Bartomeus
Ecólogo. Investigador "Ramón y Cajal" en la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC)
Aunque estudios de campo demuestran que el uso generalizado de sustancias químicas como herbicidas o plaguicidas tiene un efecto negativo claro sobre la biodiversidad, los ensayos para aprobar su uso siguen indicando que su toxicidad sobre especies importantes para el funcionamiento del ecosistema, como las abejas, es bajo.
Sin embargo, el estudio de Weidenmüller y colaboradores usa un elegante diseño experimental para mostrar que efectos muy pequeños del glifosato, un controvertido herbicida, a nivel de individuos aislados de abejorros, tienen repercusiones mucho más graves a nivel de colonia.
Los abejorros viven en colonias compuestas por cientos de trabajadoras, y por tanto los efectos para sus poblaciones han de medirse a este nivel, y es irrelevante que una substancia química no sea letal para individuos aislados, si está reduciendo la capacidad de la colonia para sobrevivir. En este caso, el glifosato reduce la capacidad de los abejorros de mantener el calor de la colonia, y esto afecta directamente a su capacidad de reproducción.
La naturaleza es un sistema complejo y no podemos comprender su funcionamiento solo estudiando sus partes; tenemos que entender cómo funciona en conjunto.