Autor/es reacciones

Fernando Gomollón Bel

Doctor en Química Orgánica, comunicador científico, cofundador de Agata Communications

La explicación sencilla: son materiales muy porosos, como esponjas, que tienen dentro muchos canales, mucha superficie interna, donde se pueden hacer muchas reacciones. En ellos se pueden utilizar catalizadores, absorber gases como el CO₂ y capturarlo para luego reutilizarlo o para quitarlo de la atmósfera. Omar M. Yaghi, por ejemplo, ha creado materiales de este tipo muy hidrofílicos para conseguir agua en el desierto en forma líquida, capturando la poca agua que hay en el aire gracias a su extensa superficie.  

Son literalmente como esponjas moleculares, como esponjas microscópicas, hechas de metales y sustancias orgánicas, por eso se llaman Metal Organic Frameworks (MOF). Tienen nodos de metal y sustancias orgánicas. La gracia de esto es que ambas partes, los metales y las sustancias orgánicas, puedes personalizarlos un poco a la carta.  

Si cambias el metal o las sustancias orgánicas, cambian las propiedades. Por ejemplo, si como sustancia orgánica pones una sustancia básica, puedes hacer MOF que reaccionan con el CO2 —que es ácido—, y lo atrapan.  

Se pueden utilizar estos Metal Organic Frameworks para capturar el CO₂ de la fermentación que se produce, por ejemplo, en la fabricación de cerveza o vino y luego ese CO₂ se empaqueta y se usa para usos alimentarios, para presurizar la cerveza, para conservar el vino... La gracia de estos materiales es que, en muy poco espacio, tienes mucha superficie para lo que quieras: hacer reacciones, catálisis, absorción de gases... y eso se está aplicando de manera industrial. 

ES