Eduard Vieta
Catedrático de Psiquiatría de la Universidad de Barcelona, jefe del Servicio de Psiquiatría y Psicología del Hospital Clínic de Barcelona e investigador del Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental (CIBERSAM)
El artículo se centra en un tema extremadamente importante, como es el malestar emocional, la salud mental comunitaria y la percepción de infelicidad. El estudio tiene una correcta base científica, aunque se basa en información reportada y, por tanto, necesariamente subjetiva. En este sentido, se trataría más de salud mental percibida que de salud mental real, y también de una evaluación de bienestar social y felicidad, o más bien de sus antónimos, malestar social e infelicidad.
Los resultados son novedosos y tienen implicaciones respecto a la percepción de la vida y la satisfacción con la misma, especialmente en los jóvenes. Los autores proponen una serie de factores que podrían explicar el malestar emocional de los jóvenes, algunos de los cuales, como el limitado poder económico y acceso a la vivienda, comparto, y especialmente el impacto de las redes sociales a través de los teléfonos inteligentes, que globalizan el malestar y radicalizan las percepciones sociales.
Pero creo que falta mencionar también, de forma más global, el contraste entre las expectativas y la realidad. Las generaciones jóvenes de la mayor parte de países incluidos en el trabajo han recibido una educación muy sobreprotectora y han desarrollado una baja tolerancia a la frustración. Creo que este aspecto es también relevante para explicar su malestar emocional.