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Miguel Landa-Blanco

Coordinador de Investigación y Vinculación de la Maestría en Psicología Clínica en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras

El Global Flourishing Study es uno de los estudios más relevantes y rigurosos realizados hasta la fecha sobre el bienestar humano. Con más de 200.000 participantes en 22 países, ofrece una mirada amplia y comparativa sobre los múltiples factores que influyen en el florecimiento personal. Las conclusiones se apoyan en una metodología sólida y en un muestreo cuidadosamente diseñado para aproximar la representatividad nacional. En el caso de España, se encuestó a 6.290 personas mediante una combinación de muestras probabilísticas y no probabilísticas, recolectadas a través de encuestas en línea. Esta estrategia permitió alcanzar una muestra amplia, aunque podría presentar limitaciones, especialmente en la representación de ciertos grupos menos accesibles. Aunque se aplicaron técnicas de ponderación para corregir posibles sesgos, conviene interpretar los resultados con cautela, sobre todo al compararlos con datos de países que emplearon métodos de recolección diferentes o con mayor cobertura territorial. También es de notar que, si bien el estudio incluye países de ingresos medios y altos, no contempla países de renta baja, lo que limita la representación de los contextos más vulnerables en esta comparación global del bienestar. 

Pese a estas consideraciones, el estudio ofrece información de gran valor para comprender el bienestar en España. Se observan niveles moderados de florecimiento, con fortalezas relativas en la calidad de las relaciones cercanas y el equilibrio entre la vida laboral y personal, pero también con debilidades en aspectos como la estabilidad financiera y la percepción de influencia y voz política. Estos hallazgos pueden orientar políticas públicas más integrales, centradas en reforzar la cohesión social, ampliar las oportunidades económicas y fomentar entornos que impulsen el propósito vital y la salud mental desde la infancia. Más allá de establecer comparaciones entre países, el verdadero aporte del estudio es señalar qué dimensiones del bienestar requieren mayor atención en cada contexto, y cómo abordarlas de forma culturalmente sensible y basada en evidencia.

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